¿Conocías a Pfizer y AstraZeneca antes de la pandemia? Tal vez no, por eso la siguiente analogía encaja a la perfección.
Quienes hayan visto Hércules de Disney identificaran en el título a aquella canción con la que se nos muestra la transición del protagonista, de un aparente don nadie a un ídolo total en Grecia. ¿Conocías a Pfizer y AstraZeneca antes de la pandemia?
Y resalto “aparente”, porque todos sabíamos que de don nadie Hércules tenía poco. No solo por ser un semidiós, sino por poseer una fuerza descomunal que puesta al servicio de la humanidad podía lograr grandes cosas. Caso similar con las grandes farmacéuticas hoy en día.
Estas farmacéuticas siempre han estado ahí, pero muy poco se hablaba de ellas. Muy independiente de su afán lucrativo, lo cierto es que siempre han tenido el poder de no solo generar grandes cambios, sino de hasta salvar a la humanidad en situaciones como esta. Al igual que con aquel semidiós griego, lo que les faltaba era reconocimiento.
La aparición de Pfizer y AstraZeneca
El último año, empresas como Pfizer y AstraZeneca ocuparon un puesto dentro de las 20 marcas con mayor crecimiento, junto a estrellas como Zoom y TikTok.
Y aún mejor, un reciente estudio de Harris Poll publicado en The New York Times registra un incremento del 32% al 62% en aprobación pública en el sector de la Big Pharma.
En ese contexto, tal parece que Pfizer ha sido el mayor beneficiado. Y es que, el portal “PuroMarketing” le dedicó un artículo informando que la presencia de la empresa en conversaciones de redes sociales creció hasta en un 633%.
Los efectos de ello lo podemos comprobar en nosotros mismos. Antes de la pandemia la palabra «Pfizer» posiblemente carecía de significado en nuestro vocabulario, pero ahora es sinónimo de vacuna y de esperanza.
Sin embargo, así como un héroe puede aparecer de la noche a la mañana, este mismo puede convertirse en villano igual de rápido.
¿Qué pasó con AstraZeneca?
Lo que está ocurriendo ahora mismo con AstraZeneca, es ese paso de héroe a villano. Esto luego de que se asociará su aplicación con la aparición de casos de trombosis.
Además, los incidentes llegaron en un contexto totalmente desfavorable para la marca al incumplir con la Unión Europea en la entrega de sus vacunas.
Por lo tanto, este hecho llevó a portales como Xataka a afirmar que la confianza en la marca había muerto y a “El País” a adjuntarle el adjetivo de fiasco.
Como podemos apreciar, la reputación de la marca es materia sensible, y mientras más grande sea en un contexto, esta se verá afectada en mayor medida. Ya sea positivamente, como el caso de Pfizer, o negativamente, como con AstraZeneca.
De este último, habrá que esperar un tiempo para poder evaluar su manejo de esta situación. Aquí mismo, en la agencia, reconocemos que un contexto así de crítico implicaría un gran reto y despliegue de distintos talentos para superarla.
En conclusión, no cabe duda de que estamos presenciando un evento notable, un ejemplo de revaloración de un sector no tan popular, como consecuencia, seguramente, de su falta de intercambio directo con el consumidor final.
Dado que son los distribuidores (como farmacias y boticas) quienes se terminan llevando el protagonismo, una posición en la mente de las personas.
A veces son las situaciones extremas las que nos recuerdan que los profesionales de la ciencia, al fin y al cabo, son muchas veces los verdaderos héroes.